Val De Loire

El Loira, un río real, es el más largo de Francia (599 km) que corre desde el Macizo Central hasta el Atlántico, cerca de Nantes. A lo largo del río Loira se producen grandes espumosos, como son los Cremantes, Saumur, Vouvray, etc. Los vinos más cualificados son los blancos, melosos y secos. También se producen rosados y tintos secos y plenos de boca. Las principales variedades de uva son, para los tintos, Cabernet Franc, Cabernet Sauvignon, Cot, Gamay y Pinot Noir. Para los blancos, Chasselas (la principal variedad, que supone el 75% del viñedo blanco), Chenin Blanc, Muscadet y Sauvignon Blanc.

Las principales denominaciones son:

Pouilly-Sur-Loire: 500 hectáreas de viñedo que producen el vino Pouilly a partir de la uva Chasselas, y el Pouilly Fumée a partir de Sauvignon Blanc. Este se hace en la margen derecha del Loira. En la margen izquierda se produce el Sancerre, que utiliza fundamentalmente la uva Sauvignon Blanc, con un poco de Pinot Noir.

Siguiendo siempre el curso del río, en las laderas que bordean al río, se extienden las nueve denominaciones de Touraine, que son : Vouvray, Montlouis, Chinon, Bourgeil, St. Nicolas de Bourgueil, Touraine Amboise, Touraine-Azay- le-Rideau, y finalmente, Les Rosedon de Loire. Estas zonas producen como media 150.000 hectolitros anuales.

Para completar el Val de Loire, hay que mencionar el viñedo Anjou-Saumur, que cubre más de 16.000 hectáreas, produciendo el famoso Rosé d’Anjou, y gran cantidad de blancos de calidad en Saumur, junto a algún vino tinto ligero.

A pesar de que el mundo cuenta cada vez con más zonas vinícolas que podemos considerar grandes, que producen una pléyade de caldos de gran calidad, es justo decir que Francia, y en particular sus más afamadas zonas productoras, sigue siendo el espejo en el que se miran los bodegueros del mundo entero. Los grandes vinos franceses han sido siempre la referencia para tantos otros, y siguen siendo la auténtica vara de medir la calidad de todos los demás. No en vano las variedades nobles francesas, y también son los métodos de elaboración aquí desarrollados los que se toman como modelo.

Hoy por hoy, uno de los grandes placeres de todo buen aficionado al vino sigue siendo el descorche y disfrute de alguno de los grandes caldos franceses, aunque a veces tengamos que hacer para ello un esfuerzo económico superior al que estamos acostumbrados.